Colombia: familia satánica sacrifica a su hijo a cambio de oro [VIDEO]

Niño de seis años estuvo desaparecido un mes. Los padres aseguran que el menor había sido poseído por un ente maligno que los acechaba y por eso decidieron someterlo en ritual maldito.

Maximiliano de sólo 6 años había sido reportado como desaparecido el pasado 21 de septiembre en Colombia. Su madre había señalado que Max, como le llamaban de cariño, había desaparecido tras acudir a realizar unos mandados. Sus vecinos se unieron y lo buscaron sin saber que el enemigo estaba muy cerca.

Un mes después, la Fiscalía se pronunció al respecto. Los culpables de la desaparición del niño, eran sus propios familiares. Cinco personas fueron detenidas al estar relacionadas y conformar una secta satánica llamada ‘Los Carneros’ que era encabezada por el padrastro del menor.

La familia fue convencida de que un espíritu maligno los acechaba y que había poseído al pequeño, por lo que decidieron sacrificarlo para librarlo del mal y obtener beneficios como oro y fortuna.

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Brujería

Cuando las autoridades de Colombia realizaron las investigaciones en el interior de la casa donde radicaba la familia, encontraron diversos objetos relacionados con la brujería como muñecos vudú, una tabla ouija, libros de esoterismo y varios cuadernos, utilizados supuestamente para realizar rituales después de la medianoche.

Tras encontrar la culpabilidad en el hecho, el líder de la secta Robinson Smith, alias Orejas, y su esposa, Susana Ceballos (madre de Maximiliano), alias La Sumisa, fueron imputados también por los cargos de desaparición forzada agravada y tortura a título de cómplices. A la abuela de Maximiliano, Damaris Estela Pérez Escalante, alias Mary, se le acusa del delito de tortura en calidad de cómplice, así como a su compañero sentimental, Fabian Alberto Monsalve, alias el Meditador.

Lo encontraron en fosa común

El pasado 27 de octubre el cuerpo del menor fue encontrado en una fosa común de la vereda Cuturú Alto, en zona rural del municipio de Segovia (Antioquia).

Las autoridades de la Fiscalía General de la Nación pudieron dar con su paradero después de que la madre del menor, Sandra Patricia Caro, asegurara que el menor estaba dentro de un socavón de oro en donde los ‘espíritus’ les ordenaron depositarlo para que el sacrificio rindiera efecto.

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