Más de 50 mil personas participaron en la Marcha por la vida y la paz en contra de la Unión Civil
Miles de personas se movilizaron este sábado en el Cercado de Lima para expresar su rechazo a la propuesta legislativa que busca aprobar la unión civil entre personas del mismo sexo.
La multitud, estimada en 50 mil asistentes, se congregó en la Plaza San Martín y recorrió las calles del Centro de Lima con banderas y globos en tonos celeste y rosado bajo el lema ‘Marcha por la Vida y la Familia’.
Entre los participantes destacaron familias, líderes cristianos y políticos que abogaron por mantener la figura tradicional del matrimonio, contrario a lo que piden los colectivos LGTB+, ONG’S y diversas instituciones que siguen la agenda 2030.
Alejandro Muñante, congresista de Renovación Popular, afirmó: «El Perú es un país pro vida y pro familia. Mo permitiremos leyes que desnaturalicen la familia no que pretendan modificar la Constitución de forma encubierta».
Mientras que la parlamentaria Milagros Aguayo expresó su oposición a la propuesta: “El Perú no debe someterse a agendas internacionales. Esta manifestación refleja que el pueblo peruano no está de acuerdo con la unión civil, y estamos en las calles para impedir que se implemente”.
Así va la Marcha por la Vida y la Familia. La voz del pueblo es la voz de Dios. pic.twitter.com/utwVZiIvgQ
— RiVar (@Rivar_2021) December 7, 2024
Sigue el debate por aprobación de ley de Unión Civil
El debate en torno a la Unión Civil LGTB causó posiciones polarizadas en el país. Mientras que sus defensores, como el legislador Alejandro Cavero, resaltan valores como “la igualdad y la libertad”, los opositores denuncian que podría abrir la puerta a la adopción de niños por parejas del mismo sexo y a cambios legales que impacten la estructura tradicional de la familia.
Es importante señalar que la iniciativa legislativa, aprobada recientemente en la Comisión de Justicia del Congreso con 12 votos a favor, 9 en contra y 4 abstenciones, enfrenta ahora un camino incierto en su discusión final.
Por el momento, las calles se convirtieron en el escenario de un profundo rechazo social sobre la unión civil LGTBI.