Infierno en México: Descubren crematorios y restos humanos en rancho del grupo narco ‘CJNG’

Al menos 500 víctimas, incluidos menores de edad, habrían sido secuestrados y forzados a convertirse en sicarios. Aquellos que se resistían, eran eliminados.


El hallazgo de un centro de exterminio y reclutamiento forzado vinculado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) fue realizado por colectivos de búsqueda donde encontraron restos óseos calcinados, cientos de prendas y zapatillas, y al menos tres crematorios clandestinos. Se trata del Rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, en México

El descubrimiento, fue realizado el pasado 8 de marzo por el colectivo ‘Guerreros Buscadores de Jalisco’, quienes, en su incansable búsqueda de desaparecidos, descubrieron la terrible escena. En los días siguientes, las autoridades iniciaron una exhaustiva inspección del lugar, y el 12 de marzo, la Fiscalía de Jalisco confirmó el hallazgo de seis fosas comunes que contenían restos óseos humanos.

Este rancho no solo habría sido un sitio de exterminio, sino también un centro de reclutamiento donde jóvenes eran obligados a entrenar para el crimen organizado. Aquellos que no pasaban las pruebas eran ejecutados y sus cuerpos incinerados.

Las imágenes y testimonios que han salido a la luz son estremecedores. Además de los restos humanos, los buscadores encontraron una larga lista de objetos personales, entre ellos 493 artículos como carteras, mochilas y ropa, pertenecientes a víctimas que podrían haber sido asesinadas en el rancho.

¿De qué manera operaba esta organización narcotraficante?

Según testimonios de sobrevivientes, el CJNG engañaba a jóvenes con falsas promesas de empleo o dinero fácil para luego obligarlos a entrenar en el rancho. Los que intentaban escapar o no cumplían con las expectativas del grupo criminal eran asesinados.

El descubrimiento ha generado una fuerte reacción en el gobierno. La presidenta Claudia Sheinbaum calificó el hallazgo como “terrible” y ordenó una investigación exhaustiva. Además, se cuestiona por qué las autoridades no encontraron estas evidencias en operativos previos.

En septiembre de 2024, la Fiscalía de Jalisco había inspeccionado el rancho durante un operativo, la Guardia Nacional intervino el predio, arrestó a 10 individuos, rescató a dos secuestrados y encontró un cuerpo sin vida.

Pese a que las autoridades mexicanas ya tenían conocimiento de la existencia del rancho, no habrían detectado los crematorios ni los restos óseos. Esto ha levantado sospechas sobre una posible omisión o encubrimiento por parte de las autoridades locales.

Más información en el siguiente video: