21 de enero del 2021
Por una mala o desviada interpretación del valor de la noticia, se viene desbordando todo límite ético y profesional con fotos y videos que ofenden tanto a las personas como a la memoria de las víctimas, el dolor de la familia y la sensibilidad pública. Los medios acogen como “éxito” tales vistas; en su euforia y competencia comercial salpican la sangre que exhiben sin piedad ni consideración alguna. La intimidad,...